martes, 28 de febrero de 2012




"...Suave como el peligro atravesaste un día
con tu mano imposible la frágil medianoche..."
Leopoldo María Panero


esta montaña repleta de clozapina no me deja ver,
no me deja soñar,
ni alejarme por los prados dónde rumian otros
al otro espacio del espejo,

tenías razón, en el otro lado del espejo,
van desnudos y ríen en silencio,
como Ares y Marte,

la muerte repta por los confines de la puerta,
De repente el cielo derrama clavos y herrumbre,
y yo cierro mis ojos de cuencas, cuevas...

para hacer el amor,
segundos de electricidad,
con la imagen que no veo,
las manos que no sienten,
y la presencia dormida.