miércoles, 30 de noviembre de 2011

mientras, me vas matando

Quieren cegarte los ojos, comiéndolos de oscuridad y cieno,
la ciudad quebranta su quejido nocturno tejida con su tela de amianto,

no chilles chiquillo de pelo negro,
y dame la mano,
entremos,en esta boca de metro, sucia y destartalada...
que emana un aliento cálido y fétido.
Vamos, qué temes?

No tengo miedo.
No te temo.
No temo ni a los raíles,
ni a la gente que anda dormida por los andenes,
no temo a la suciedad incrustada en la parada,
no temo,
no temo...
pero sobretodo,
no te temo a tí,
sí, a ti, cancerbero qué alimentas mi estómago reventado,
mientras, con la otra mano,
me vas hiriendo,
me vas matando...